La costumbre nos lleva a pensar, cuando se habla de comedias
musicales, en obras teatrales de gran producción y estrellas protagonistas,
hasta la comparación de cualquier producción local con su correlativa original
americana o londinense.
Sin embargo, La Parka es un musical diferente, divertido,
que se ríe de la misma muerte y festeja “eso que nadie conoce” como el pasaje a
otra cosa distinta a la vida. Toma elementos del humor negro junto al glam
colorido y kitch de viejas épocas para resignificarlas.
Los personajes son pocos y hasta muy austeros, pero sin
embargo, muy ricos en interpretación vocal, actuación y baile. También se
destacan los bailarines que acompañan los números. En este sentido, el Gladiolo
de Facundo Rubiño es impecable. La imposición de su voz es exacta para el
efecto gracioso que se quiere lograr y su actuación merece repetidos aplausos. También
el Ahorkado de Ángel Hernández satisface con sus canciones y las melodías pop
dulces de su voz. El solo hecho de pensar que se pasa casi toda la obra “ahorcado”
sobre una tarima es un merito. Por otro lado,
Omar Calicchio sigue poseyendo esa mágica voz de trueno que
cuando quiere la saca y hace temblar a cualquier sala de teatro.
La letra de Diego Corán Oria y la música de Soldera por
momentos no se llevan muy bien musicalmente. Pero si alcanzan el tono enigmático
y divertido del tema. Esto se nota en el solo de Felipe, interpretado por
Eliseo Barrionuevo, cuya destreza vocal tampoco ayuda demasiado.
Por ahora las funciones
terminaron en el Teatro 25 de Mayo de Villa Urquiza, pero esperemos que repongan esta obra maravillosa y graciosa que vale la
pena ver. Sigan el link de abajo para las novedades.https://www.facebook.com/laparkaelmusical
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